Nacimiento del Palenque de San Basilio16
Con el asentamiento logrado después de la persecución
cruenta que había desatado la Corona contra los rebeldes de los Montes de
María, estos se reúnen en un lugar protegido e inexpugnable, cerca del Canal
del Dique, para refundar un pueblo con el modelo dejado por Benkos y mejorado
en los cien años de guerra cimarrona.
Corrían los años de 1700 cuando las condiciones para fundar
el pueblo estaban dadas: se contaba con la autonomía de un territorio, se
tenían los frutos obtenidos de la tierra y del agua y se habían construido las
casas y los lugares que les permitiría crear y recrear su legado cultural y
espiritual. En la memoria colectiva de este acontecimiento fundacional aparecen
como imprescindibles el legendario héroe Benkos, la mítica María Lucrecia, encargada
de recordar la importancia del lumbalú sobre la tierra palenquera y la imagen
trascendente de Catalina Luango, mediadora de la comunicación de los habitantes
con sus familiares muertos, sus ancestros y sus antepasados. San Basilio,
procedente de la fuente católica, es otra de las figuras que orbita alrededor
de este evento. Según algunos relatos se dice que un día la estatua del
venerable era llevada de San Agustín de playa Blanca con destino a un pueblo
del interior, y al pasar por los dominios del palenque, de repente quedó
anclada precisamente en un lodazal cercano al pueblo, sin posibilidad de
movilizarla. Este hecho fue inmediatamente interpretado como un buen augurio
enviado del más allá; sin demora, San Basilio fue incorporado al imaginario espiritual
de este pueblo, y de ahí su nombre.
Para los palenqueros de los
Montes de María los siglos XVI y XVII fueron los años de la construcción del
espacio de la libertad en el tiempo de la guerra. Para los palenqueros de San
Basilio el siglo XVIII fue el del asentamiento en el tiempo de la paz hacia
adentro, porque en el resto de la geografía colombiana se había agudizado la
lucha contra los cimarrones. Los ejemplos de los palenques establecidos y por
15 Carta al Rey en abril de 1716 de don Jerónimo de Badillo,
citada por Gutiérrez, Azopardo, Ildefonso: Los afroamericanos: Historia,
cultura y proyectos, Santafé de Bogotá, Editorial El Búho, 1996, pág. 173.
16 El nombrarse ha sido motivo
de controversia en Palenque, el Maestro Casiani por ejemplo, en conversaciones
dice que San Basilio es de Palenque y no Palenque es de San Basilio, de manera
que la nominación no importa por la advocación que le da intencionalidad a la
presencia del santo, sino por quién le pertenece a quién.
eso reconocidos en las provincias del Caribe colonial, eran
un argumento de peso para negociar propuestas autónomas de poblamiento,
partiendo del presupuesto de la libertad.17 Palenque de San Basilio nació como
resultado de este proceso.
Por su permanencia sobrecogedora en el territorio, su
persistencia y tenacidad, el Palenque de San Basilio se constituye en una
sociedad que adquiere sus derechos para demostrar cómo son las personas libres.
Como consecuencia de esa libertad se da el reconoci-miento de autonomía de
gobierno y por lo tanto de una comunidad con criterios y maneras políticas,
religiosas, pedagógicas y de comuni-cación propias
En 1772 el Palenque de San Basilio aparece reconocido como
pueblo integrante del Partido de Mahates. Su presencia ya no es considerada
subversiva; se le quita la denominación de palenque, aunque en la noticia
geográfica que narra el Obispo Peredo de Cartagena, hace referencia a la
herencia cimarrona:
“San Basilio, población de negros en lo interior del monte,
tuvo su origen en muchos esclavos fugitivos de varias personas de esta ciudad,
que abrigados de la asperosidad de la Montaña de María entre su ciénaga y sitio
de Mahates esta-blecieron su palenque. No se pudieron reducir a servidumbre
aunque se entró varias veces con fuerza de armas en se derramó mucha sangre,
hasta que al principio de este siglo [XVIII], gobernando el obispado el
ilustrísimo señor don Antonio María Casiani, los redujo con acuerdo del señor
Gobernador de la Provincia, de esta población con perdón general y goce de
libertades y la precisa obligación de que no se pudiesen admitir allí otros
esclavos prófugos, en el futuro.
Fuente: PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA
MINISTERIO DE CULTURA /
INSTITUTO COLOMBIANO DE ANTROPOLOGÍA E HISTORIA
Entidades Asociadas:
Consejo Comunitario Kankamaná de Palenque de San Basilio
Corporación Festival de Tambores y Expresiones Culturales de
Palenque de San Basilio
Institución Educativa Técnica Agropecuaria Benkos Bioho